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Trampas cromáticas, técnica ecológica para control de plagas
En el ámbito del cuidado de cultivos de hortalizas, sean en casa, huertos comunitarios o hectáreas, existen diferentes métodos para mantener en equilibrio “las plagas”. Además de los métodos más comunes como los insecticidas naturales, existe entre las prácticas ecológicas y sustentables las trampas cromáticas. Es importante mencionar que no es recomendable utilizar este método como principal y único, debes considerarlo como una técnica adicional al principal método que se utiliza o utilizará para mantener el equilibrio de las plagas.
Para entender mejor las trampas cromáticas en este post te explicaremos lo que es, el cómo se descubrió, para que tipo de plagas es, los pros y los contras, y como realizarlo en casa e instalarlo.
¿Qué son las trampas cromáticas y cómo surge?
Como su nombre lo dice, es una trampa hecha con materiales reciclados, agregándole un tono de color específico para atraer a los insectos y estos queden atrapados (pegados). La palabra cromático se utiliza cuando existe un color visual, en este caso que se involucra a la trampa. Con el paso del tiempo se hicieron diferentes variaciones y diseños, sin embargo, el concepto sigue siendo el mismo.
Establecer quién es el verdadero inventor o grupo, es algo incierto, ya que es una técnica que lleva años realizándose. De hecho, el principal objetivo de un principio, era poder detectar los insectos que se tenían en el lugar colocando una lámina rígida con un color en específico y su respectivo pegamento. Estos estudios con el tiempo fueron dando resultados, mostrando los colores que funcionan para detectar los insectos en el sitio. Después este método fue tan eficiente, que ahora en vez de detectar también se utilizó para controlar a los insectos colocando más de ellas en todo el sitio.
¿Para qué tipo de plaga son las trampas cromáticas?
Actualmente, se siguen realizando estudios para detectar más colores y plagas atrapadas, no obstante, las únicas plagas que se pueden controlar específicamente son con sus respectivos colores;
- Color amarillo: mosca blanca, pulgones, trips, mosca esciárida, dípteros, minadores de hoja, mosca de mantillo.
- Color azul o celeste: trips, mosca esciarida y chinches verdes
- Color roja burdeos: mosquito verde
- Color negro: Minador de tomate
- Color blanco: insectos variados.
- Color transparente: insectos variados
Estos plagas que son detectadas comúnmente en los colores mencionados.
Pros y contras de las trampas cromáticas
Pros
Una de las grandes ventajas de las trampas cromáticas es que es un método completamente ecológico y esencial en el cultivo orgánico de hortalizas. Ayuda a reducir los costos invertidos en insecticidas, ya que ayuda al control de plagas y también a tener menos perdidas en los cultivos. Te mantiene al tanto sobre la diversidad de insectos que existen en la zona y cultivo. Si lo utilizas como un método adicional, se tendrá grandes resultados. La durabilidad es prolongada, puede durar de 6 a 8 días, lo cual la persistencia es mayor al que se recibe en un tratamiento de insecticidas naturales.
Contras
Es una técnica en el que se invierte tiempo en darle mantenimiento a las placas o material. No siempre funciona como lo esperado, depende del cultivo, el clima, la temporada. No es una técnica que se debe considerar primaria, debe considerarse como una adición más al método principal que se establezca. En ocasiones pueden quedar atrapados insectos benéficos como; abejas, catarinas o avispas pequeñas. La mayoría de las veces se utilizan pegamentos tóxicos para el medio ambiente, es mejor el uso del aceite vegetal o sustancias naturales pegajosas.
Como realizar trampas cromáticas en casa
Para realizar trampas cromáticas en casa, es necesario tener en cuenta el material y el uso de los colores mencionados anteriormente para el tipo de plaga que se quiera tratar. Si estás empezando y quieres saber qué tipo de insectos hay en tu huerto o cultivo, es recomendable iniciar con el color amarillo y azul. Primero hablaremos de la base, que es el recipiente o placa que estará de un color en específico y después del ingrediente esencial.
Materiales.
El recipiente puede ser de plástico reciclado como el PET o incluso HDPE, también, se puede utilizar el aluminio de las latas de refresco. Como recomendación es mejor el uso del plástico, ya que, el aceite o pegamento queda mejor impregnado que en una lata de aluminio. El plástico o la lata debe ser de color que se pretende utilizar, este puedes conseguirlo desde el color de fábrica (que sería un ahorro) o de lo contrario deberás pintarlos del color necesario. Hay quienes prefieren dejar todo el recipiente original o realizar cortes en forma de placas, esto se deja libre de elección.
Después se utiliza el ingrediente clave para hacer que la trampa funcione, este ingrediente puede ser pegamento o aceite. Te recomendamos el uso del aceite, puesto que el pegamento debe ser uno en específico para insectos y que suele ser tóxico cuando se desecha. El aceite que se emplea debe ser de cocina y este puede ser, cuál sea, entre más viscoso y con olor dulce mejores resultados, como los aceites vegetales.
Consideraciones.
Tomando en cuenta los datos de Dominio Agricola sobre las trampas cromáticas. Es recomendable colocar una trampa cromática cada 2 a 5 metros, sin embargo, esto con el tiempo lo sabrás, ya que puede ser incluso un espacio pequeño, pero que solo unas cuantas trampas no serán suficientes. En nuestra experiencia, es mejor utilizar una trampa cromática por cama de cultivo de 1 metro cuadrado y aumentar cuando la cama de cultivo sé más grande o el surco. Con esto se puede saber cuantas aproximadamente necesitaras.
Realizando las trampas.
Con esto mencionado, no queda más que escoger tus recipientes (cortarlos si así lo prefieres), pintarlos e impregnarlos de aceite. Se recomienda utilizar un palo de madera como apoyo para que quede instalado donde se desea, ya que si se cuelgan con cordones se corre el riesgo que por aires fuertes el aceite se seque (si no existe este problema puedes proceder a colgar tus trampas).
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