Conciencia verde

Si has empezado en las prácticas de compostaje en casa o en cualquier establecimiento y actualmente sabes que el tiempo de tú composta esta lista para usarse independientemente del tipo. Es necesario que determines la cantidad que utilizaras para tus plantas, tus cultivos o tu huerto y su proceso de secado. Para ello es importante hablar previamente de algunos temas importantes.

Composta madura vs. composta fresca.

En algunos artículos, libros o información en internet has notado que el compost se divide en 2 formas de utilizarlo; de forma “madura” o “fresca”. Aunque no tienen mucha diferencia, esto es importante para el uso que decidas darle.

Composta madura.

El compost maduro es aquel compost que lleva un proceso más amplio o más largo. Con el fin de poder venderlo, bien obsequiarlo, donarlo o incluso utilizarlo como tal. Este compost dura alrededor de 6 a 7 meses en un estado de reposo. Es decir, que después de su proceso normal de compostaje (2 o 3 meses) solo queda revolver y agregar poca agua (si es necesario) durante los meses restantes. Sin volver agregar residuos orgánicos.

Este tipo de resultado de compost es una tierra esponjosa, porosa, negra pero sin casi ningún residuo orgánico restante y sin humedad excedente. Este es una composta ideal debido a que retiene mejor el agua y no contiene ningún tipo de hongo que pueda perjudicar las plantas o cultivos, pero se vuelve algo inquietante por el tiempo que se tarda en tener este resultado.

Composta fresca.

El compost fresco es aquel que en comparación del maduro es un proceso más rápido (2 a 3 meses). Este compost es más utilizado especialmente de manera de “emergencia” para aquellos cultivos o plantas que necesiten nutrientes y minerales.

El compost fresco no puede ser vendido o donado debido a que en ocasiones quedan olores, exceso de humedad, residuos orgánicos y quedan algunos hongos que puedan perjudicar algunas plantas que están débiles o muy chicas. Sin embargo, el compost fresco, es el más utilizado en los huertos urbanos, por los agricultores, siempre y cuando ellos mismos lo hagan.

Diferencia.

Como sabrás, realmente no tiene mucha diferencia si lo ves del lado de beneficiar a las plantas. Pero como se dijo anteriormente, es depende del uso que se le quiera dar. Tal vez quieres regalar o vender y lo mejor será que se tenga que madurar el compost.

Tal vez quieras utilizar el compost que realizas y por comodidad y tiempos es mejor utilizar el compost fresco, aunque también puedes madurarlo para utilizarlo.

Si se hace una comparación entre los nutrientes y minerales que tienen de un puñado de ambas formas, verás que tienen los mismos, pero las plantas tardaran más en alimentarse de compost fresco que en maduro.

Al igual que es más fácil que se degraden los restos del compost fresco en el suelo de la planta que dejarlos madurar por sí solo.

Esto lo decides tú, qué tipo de resultado de compost quieres. Solo recuerda que los dos son beneficiosos.

Proceso de secado de la composta.

Este proceso o actividad es para ambos tipos de resultados mencionados anteriormente (el compost fresco no es necesario, pero hay quienes optan por hacerlo, debido a que el compost fresco se utiliza sin secar).

El secado solo implica dejar secar el compost, en sombra y sin nada que tape el mismo. Se coloca sobre una lona, plástico o una tela para absorber la humedad excedente. Se deja aproximadamente 2 semanas y cada día es necesario revolver con una pala para que el compost seque por todas partes. Mientras se seca, es necesario romper los terrones que se forman con la misma pala. Por último, se debe cernir (si se utiliza directamente en plantas no es necesario, al menos que se desee) para separar las piedras y restos orgánicos.

Solo quedará guardar tu compost lista o bien utilizarla en ese momento.

Utilizando el compost.

Existen 2 formas de utilizar el compost; de forma sólida (como tal la tierra) o bien de forma líquida (té de compost).

Sólido.

En forma sólida se recomienda utilizar 1/2 taza de compost por cada planta, o bien si tienes cultivos o huertos con más espacio se recomienda utilizar de 1 a 2 kg por metro cuadrado. Esto 1 vez al año, pero si crees que es conveniente puedes hacerlo cada 6 meses. Incluso si observas que la planta necesita puedes hacerlo sin ningún problema, no causa enfermedades.

Por ejemplo, si tienes una sola planta en maceta puedes utilizar 1/2 de taza de compost, lo esparces bien y se revuelve junto con la tierra de la maceta o bien puedes hacer esa preparación antes de trasplantar revolviendo toda la tierra.

Ahora, si tienes una cama o terreno de cultivo, multiplica sus lados (Ancho y largo) para tener los metros cuadrados y hacer una equivalencia. Es decir, si tu cama es de 1.75 metros x 0.60 metros (60 cm) esto es igual a 1.05 metros cuadrados o si tienes un terreno de 6 metros x 5 metros de cultivo es igual a 30 metros cuadrados.

Por lo que tendrás que utilizar 1 a 2 kg de compost por cama o 30 a 60 kg por el total del terreno, dependiendo de que tan fértil sea tu tierra puedes utilizar 1 kg o bien si necesita más nutrientes agregar los 2 kg. Se agrega por encima (espolvoreando) y una vez que termines, procura revolver toda la tierra y listo.

Líquido.

Existen muchas recetas, sin embargo, este método solo implica utilizar el compost para que los nutrientes y minerales sean diluidos en agua. Para ello necesitarás 1 litro de compost o 2 kg y 19 litros de agua.

El compost lo tendrás que colocar en un costal de tela bien amarrado y lo dejaras reposar en los 19 litros de agua (con agua destilada, previamente hervida, de lluvia o bien dejándola reposar al sol 24 h previa para que no tenga cloro).

Se recomienda un mínimo de 24 horas a un máximo de 72 horas. Una vez pasado el tiempo que hayas escogido, exprime lo más que puedas del costal y este concentrado puede ser diluido en 200 litros de agua para regar a las plantas o cultivos.

Notarás que el agua se pone café oscuro con aspecto turbio. Hay quienes no utilizan costal si no simplemente colocan la tierra directa en el agua. Incluso hay datos beneficiosos que concluyen que dejar reposar 1 semana, con una bomba de agua de pecera para generar oxígeno y melaza, se tienen mejores resultados.

Existen recetas donde utilizan 1 kg o 3 kg de compost, que le agregan otros nutrientes o minerales como; ceniza, melaza, harina de rocas, sales empson, etc. Esto será tu decisión. Sin embargo, con el puro compost es más que suficiente.

Más que tierra.

Recordemos que el compostaje además de ser una solución benéfica para los problemas ambientales de hoy en día, es una forma potente y sobre todo natural de alimentar a nuestras plantas, huertos y cultivos.

No es solo tierra, es un puñado de vida, un material viviente que nos da nuestro planeta y es una actividad tan valiosa que ningún fertilizante químico sintético ha podido superar.